El editor de la revista Forbes, Malcolm Forbes explica su fórmula del éxito y porque nadie es indispensable
«En los negocios existen las personas invaluables, pero no existen las personas indispensables».
Malcolm Forbes
Podemos ser muy valiosos para la empresa en la que trabajamos, pero al final del día nadie es imprescindible. Así lo dice Malcolm Forbes, fundador de la revista Forbes.
¿Qué pasaría si después de faltar algunos días a tu trabajo te dieras cuenta que no pasó absolutamente nada? o, lo que es más dramático, ¿que todo funcionó mejor en tu ausencia?
No importa el puesto que tengas en la empresa, darte cuenta de que eres prescindible no resulta agradable. Como dice Forbes, nadie es indispensable. Quizá somos muy valiosos, unos más que otros, pero nadie es indispensable.
Si trabajas en una empresa sin muchos controles, quizá tu ausencia pase más desapercibida. En algunas empresas, muchas veces grandes, es posible que no se note tu ausencia porque aunque todos somos importantes, la aportación de cada uno es menos importante en el total de la empresa. También podría ocurrir que tu ausencia pase desapercibida, probablemente gracias a un liderazgo que no está exigiéndote lo necesario. Si alguno de estos es tu caso, disfruta tus vacaciones y aprovecha que trabajas allí.
Si el que sale de vacaciones es tu jefe y al regresar se encuentra que no hizo falta, puede ser que se preocupe y quizá decida cambiar las cosas aunque no haya justificación, antes de emprender su siguiente viaje. Este tipo de jefes no tiene claro que precisamente su trabajo es preparar a los suyos para que puedan trabajar perfectamente en su ausencia.
Un colaborador exitoso debe poder vivir bien con el concepto de ser prescindible, tomándolo desde una perspectiva positiva. Es tu responsabilidad asegurarte que a pesar de qué no estés, todo continúe funcionando. Si eres el jefe y tras una larga temporada vuelves al trabajo y todo está bien, debes apreciar a tu gran equipo y al trabajo que has hecho que permite que trabajen bien en tu ausencia.
El punto medular no es qué debemos hacer para dejar de ser prescindibles, sino cómo manejar el hecho de que ninguno de nosotros es realmente insustituible. Debemos vivir y trabajar con ello. Esto se soluciona, básicamente, reinventándose y añadiendo valor en cada una de nuestras actividades. Pero sin sentirse a uno mismo como insustituible.
El reto está entonces en agregar valor haciendo bien nuestro trabajo y yendo más allá, haciéndolo con entrega, con proactividad y viendo todo el tiempo cómo hacer mejor las cosas.
Si tu actitud es la de hacer tu trabajo y nada más, probablemente una ausencia prolongada le abrirá los ojos a tus jefes que no solo no eres imprescindible, sino que ni siquiera eres muy valioso.
Así que si quieres ser indispensable y quieres agregar valor, probablemente lo lograrás haciendo algo que realmente te gusta. Por ello y para concluir, citemos otra famosa frase de Forbes, que probablemente sea su Fórmula del éxito: El éxito viene de hacer lo que quieres hacer. No hay otra forma de ser exitoso.
BIOGRAFIA.
Malcolm Stevenson Forbes nació en 1919. Fue editor de Forbes magazine. estudio en la Lawrenceville School y en Princeton University (1941). Sirvió en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial para después de incursionar en la política, incluyendo su paso por el Senado del estado de Nueva Jersey (1951-1957) y de una candidatura para la gubernatura del estado, se involucró totalmente en la revista en 1957. La revista creció durante su gestión, diversificándose a otros negocios como los bienes raíces.
Malcolm Forbes tuvo un estilo de vida extravagante, ejemplificado con su avión privado Boeing 727, varios yates, una gran colección de arte, una colección de motocicletas Harley-Davidson y un castillo en Francia, entre otras cosas.